10-12-2016
Cuerpo textual de la nota aparecida en Diario Clarín:
“Villa Gesell está convulsionada. Y no sólo por el ataque a tiros, con tintes mafiosos, que sufrió el secretario de Seguridad Juan Manuel Cadena, que en la Provincia vislumbran como resultado de los cambios que se impulsaron en la Bonaerense. El escenario en la ciudad balnearia es complejo desde lo político ya que el intendente, Gustavo Barrera, acusa a los concejales de la oposición por un proyecto que aprobaron en la última sesión del Concejo Deliberante: dijo que "se bajaron los impuestos ellos mismos" ya que -apuntó- "son propietarios de parcelas a las que se le reducen" las tasas a través de esa ordenanza.
Si bien en la última votación la iniciativa fue avalada por los dos tercios de los ediles (12 votos a favor y 3 en contra), Barrera, de origen peronista, apuntó especialmente contra Jorge Martínez Salas, jefe del bloque de Cambiemos; y Atilio Roncoroni, referente del Frente Renovador. "Hicieron un proyecto a medida, que los beneficia directamente", denunció el jefe comunal. "Ellos tienen interés manifiesto porque son propietarios de parcelas a las que se le reducen los impuestos", completó en diálogo con Clarín.
Concretamente, la ordenanza N° 2522 que sancionó el Concejo Deliberante reestablece un régimen impositivo especial -y con topes- para las grandes propiedades de tierras que no están urbanizadas. El intendente había vetado la iniciativa el mes pasado, pero los ediles insistieron y dejaron firme la ordenanza.
"Con esta medida, la municipalidad pierde un millón de pesos por mes", se quejó Barrera, quien argumentó su decisión de subir los impuestos en función del "contexto del país" y "la necesidad de recaudar con un criterio de equidad, igualdad y universalidad" que tiene su municipio.
En ese sentido, entre sus planteos, Barrera sostuvo que "los beneficiados con la ordenanza son propietarios de fracciones de más de dos mil quinientos metros cuadrados". "Y si se aplica esto -resaltó- los propietarios de un terreno de más de 2501metros cuadrados pagarían apenas $580 mensuales, menos que los vecinos con propiedades más chicas", expuso.
Clarín se comunicó con los dos ediles apuntados, que rechazaron las acusaciones del jefe comunal, cuestionaron su decisión de subir los impuestos y aseguraron que tienen "el apoyo de los vecinos".
"No tengo terrenos en la zona afectada por el decreto, sino en una zona rural. Las parcelas de las que trata la ordenanza no cuentan con servicios, no están zonificadas, y esa es su culpa", replicó Roncoroni.
"El vecino está conforme con la ordenanza porque no se pueden subir los impuestos sin justificativo", agregó el edil massista, quien adelantó que va "a querellar" al intendente "para que se retracte por lo que está diciendo".
Por su parte, Martínez Salas, nieto del fundador Carlos Gesell, señaló: "Lo que hicimos fue frenar una suba de tasas desmedida, dispuesta por el intendente. El proyecto, que vuelve a fijar los topes sin los cuales se disparan los impuestos mensuales, tuvo el respaldo del 80 por ciento del Concejo Deliberante".
Martínez Salas explicó que "las parcelas están en zonas que no están subdivididas y que no tienen otra actividad que no sea camping".
Por último, respecto a la acusación, explicó que los terrenos pertenecen, en realidad, a su madre producto de la herencia familiar. "Pero de ninguna manera el Concejo Deliberante impulsó este proyecto por un motivo individual", completó.”
Cabe destacar que la defensa de los concejales no refleja la realidad puesto que en muchos de esos terrenos hay construcciones y complejos. La baja de impuestos propulsada por el concejo afectan a 40 propietarios que poseen aproximadamente 2 millones y medio de metros cuadrados sobre 16 millones que tiene todo el partido, de esos 40 propietarios, 4 tienen en su haber casi el 40% de esas tierras, en ese lote se ubica el concejal Martinez Salas.
La controversia nace en la ética que conlleva el poder del voto de un concejal sobre una ordenanza que lo beneficia directamente.