07-02-2017
El tótem, una obra que por su imponencia parece elevarse hasta el cielo, sobre la mano derecha en el acceso Norte a la Villa, se puede divisar el monumento realizado en honor a su fundador, Don Carlos Idaho Gesell. El mismo es obra del escultor alemán Pablo Hannemann, quien conoció a “Don Carlos” y lo hizo conocedor de el proceso de su armado.
El Secretario de Cultura, Educación y deportes, Carlos Rodríguez nos cuenta que “el tótem es uno de los pocos patrimonios símbolo que quedan en Villa Gesell, y junto al museo es una de las postales más representativo de la Ciudad”. Agregando también que fue “decisión de Don Carlos y Hanneman, emplazarlo en el Acceso de Villa Gesell para recibir y despedir a los personas”.
La escultura que fue inaugurada en 1977, tiene en su base peces y pinos que representan el mar y los bosques, arriba se encuentra “Don Carlos” luego la familia y una paloma como como ave entrenador que crea y regula los elementos de la naturaleza. El simbolismo, que conlleva el Totem, representa la Familia en libertad disfrutando el bosque y la playa de Villa Gesell.
Cabe destacar, que el tótem fue realizado en cemento y no tallado en madera como los conocidos de Canada y Alaska. Pero el mismo cuenta con la particularidad de que no es cemento pintado, sino que es cemento coloreado, lo cual dificulta los cuidados y no se puede pintar para su restauración.
Entre otras cosas, la figura del Tótem es muy importante en la región debido a que no hay monumentos de este tipo, salvo en la Plaza Canada frente a Retiro en CABA casi no hay tótem en la zona solo en buenos aires frente de la terminal de retiro en la plaza Canada.
Algunas familias detienen el auto al ingresar y año tras años se sacan fotos con el tótem, otros simplemente lo miran y respiran felices porque es parte de la bienvenida a la ciudad que eligen cada año para sus merecidas vacaciones.