Situada en la intersección de Paseo 120 y Avenida 3, Doña Haydee se ha convertido en un nombre conocido y querido en toda la ciudad. Fundada por Haydee, quien fue una de las primeras residentes del barrio de 127 y 5, adquiriendo su primer terreno directamente del fundador de nuestra ciudad, Don Carlos Idaho Gesell.

Comenzando como dueños de un pequeño almacén en la Avenida 3, Haydee y su esposo trazaron su camino en el comercio geselino. Luego, encontraron su ubicación emblemática en Paseo 120, y la historia de Doña Haydee comenzó a tomar forma. Inicialmente, el negocio funcionaba como una rotisería, pero con el tiempo, evolucionó para convertirse en una fábrica de pastas, equipada con una "Pastalinda" adaptada para la producción casera. A medida que pasaron los años, la fábrica expandió sus instalaciones con la incorporación de maquinaria profesional, estableciéndose como la primera fábrica de pastas de Villa Gesell.

“Un emprendimiento pionero, una empresa pionera, familiar, Una empresa que simboliza a Villa Gesell, como tantas otras que tenemos aquí, y que tienen reconocimiento a nivel nacional por la cantidad de visitas turistas que tenemos”, expresó el intendente.

En la actualidad, el negocio está en manos de la nuera de la propietaria original, quien no solo continúa con la tradición de excelencia y sabor, sino que también ha sido reconocida como una destacada emprendedora en nuestra comunidad. “Este es un legado que nos ha dejado Haydee y lo seguimos en familia, año a año, invierno, verano, y con unos colaboradores que tenemos que son amorosos, que hace muchos años están con nosotros y que realmente le ponen el hombro a la fábrica de pasta”.

Más de cincuenta años de compromiso con la calidad, el servicio y el inconfundible sabor de las pastas artesanales hacen de Doña Haydee un pilar en la vida de los geselinos. Esta historia de éxito y dedicación demuestra que con esfuerzo y pasión, los sueños pueden convertirse en realidades que enriquecen a toda una comunidad.