El Intendente Gustavo Barrera participó de un humilde acto homenaje al pionero Santiago Ruggieri. Junto a sus familiares esparcieron las cenizas de Ruggieri al pie del Ombú obsequiado décadas atrás al Fundador de la Ciudad: Carlos Gesell. Además se instaló una placa conmemorativa.

En el emotivo momento, estuvieron presentes el Jefe Comunal, Gustavo Barrera; el Director de Cultura, Héctor Ortiz, Teresa de Ruggieri y sus dos hijos. Posteriormente, Barrera dialogó con los familiares quienes narraron el momento de entrega de aquel bonsai, que actualmente se dice que es el Ombú más cerca del Mar.

Según cuenta la historia, Teresa y Santiago Ruggieri le obsequiaron en la década del ’70 un ombú bonsái a Carlos Gesell, quién primero lo crió en su vivero personal junto a Emilia Luther y luego dispuso su trasplante a ese bajo entre dunas que más tarde sería conocido como Plaza Primera Junta.

Su supervivencia causa aún asombro entre los especialistas en botánica, quiénes no dudan en afirmar que esa especie es una de las que más cerca yacen del mar. Acostumbrado a desarrollarse en suelos secos gracias a su gran capacidad para retener y conservar líquido en su interior, el ombú era muy utilizado antiguamente para establecer mojones y puntos de referencia en la vasta llanura pampeana.

Una ordenanza aprobada en 1990 establece la “protección y contralor del perfecto desarrollo y salud” del ejemplar. Veinte años más tarde, como parte de una de las actividades propuestas por el Museo del Bicentenario y ante la presencia de un veterano pero inoxidable Santiago Ruggieri, se colocó un nuevo cartel de señalización con el nombre del árbol tallado en madera por la vecina Rocío Salas, integrante del Museo y Archivo Histórico Local y reconocida activista ambiental.

Don Santiago Ruggieri falleció poco tiempo atrás. Su familia, con notable sentido de poética sensatez, ha decidido depositar las cenizas en la base de este legendario árbol.
(historia gentileza pulso geselino)